Sinaloa, el granero de México, es muy probablemente uno de los estados mejicanos más desconocidos para el turismo europeo. A pesar de este desconocimiento, su privilegiada ubicación y una amplia franja costera asomada al Pacífico, lo convierte en un destino en auge del que merece la pena hablar. Esta localización frente a la península de la Baja California mexicana y en la entrada del famoso golfo de México con su epicentro turístico, Mazatlán, ha comenzado a despertar el interés por los viajeros que huyen de destinos más tradicionales. Las archiconocidas playas de Cancún y la famosa Riviera maya o los centros turísticos del Pacífico como Acapulco o Puerto Vallarta no necesitan ya de esta carta de presentación.
Mazatlán, la segunda ciudad en población de Sinaloa tras la capital Culiacán, cuenta con una importante oferta hotelera, muchos hoteles en Mazatlán y disponibles para todo tipo de público. Y es que la conocida como Perla del Pacífico no es un destino turístico nuevo ni mucho menos la ciudad. La vieja ciudad ya fue utilizada por los españoles como puerto de salida en su expansión por el continente y todavía se conservan restos de la ciudad colonial fundada en el siglo XVI. Pasear por las callejuelas del bonito pueblo de Mazatlán significa transportarse a siglos pasados y a pesar de que la mayoría de las más vistosas edificaciones son del siglo XIX, hay más de un lugar donde hacer una parada y disfrutar de esa sensación viajera de trasladarse en el tiempo. Animadas siempre para esta parada son conocidas sus plazoletas como la de Machado alrededor de la cual se concentran sus máximos atractivos arquitectónicos como el Teatro Angela Peralta o en vecindad, la catedral de la Inmaculada Concepción.
Y si de paseos hablamos, hay que conocer su malecón, el que dicen más largo del mundo y que con 21 kilómetros es el lugar perfecto donde disfrutar de un bello atardecer. Otra de las clásicas caminatas nos puede llevar hasta el faro de Mazatlán, el emblema de la ciudad y el que es considerado el faro natural más alto del mundo. Y es que los 152 metros que lo elevan sobre el cerro del Crestón así lo han querido. Una caminata de 30 minutos que nos llevará a disfrutar de las más bonitas vistas de la ciudad y el Pacífico.

Pero si por algo sobresale la costa de Mazatlán es por sus playas y establecimientos hoteleros. Difícil decantarse por una de las muchas playas en concreto y lo mejor será recorrer algunas de las mejores como puede ser la playa de Olas Altas, la más tradicional. Otras como playa Gaviotas, playa norte, Cerritos o el Delfín forman parte de este listado de imprescindibles. Y si queremos algunas donde disfrutar de una naturaleza más salvaje no podemos dejar de visitar las de la isla Venados a pocos minutos de la costa en kayak o la isla de la Piedra algo más alejada, en realidad parte final de un fabuloso tour en catamarán de tres horas.
¿Y cuando ir a disfrutar de este paraíso mejicano?. Pues si queréis un broche perfecto a vuestra decisión, acercaros 40 días antes de la Semana Santa y podréis disfrutar de uno de los carnavales más famosos de América y del mundo. Ya sabes algo más de Mazatlán y Sinaloa, ciudad, costa y estado muy animados como veis, conocidos por su buena ambiente, sus tradiciones y, dicho sea de paso, apodada la “Capital del camarón”… ¿Te animas? Ahí lo dejamos.
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